La refundación: las generaciones que reinventaron el negocio

06.09.2017

Heredaron el legado familiar, pero lo aggiornaron y potenciaron; los casos de Della Casa, Sinteplast y Grupo Presidente

Las compañías familiares están en todos los sectores. Bastó con invitar a tres representantes de este tipo de organizaciones para entender la diversidad: una empresa de pintura, otra de muebles y una constructora. Se trató de Claudio Rodríguez, director de administración y finanzas de Sinteplast; Juan Pablo Gavuzzo, director ejecutivo de Della Casa, y Julián Groisman, director de operaciones (COO) de Grupo Presidente.

Rodríguez participa de una empresa familiar que fundó su padre en la Argentina en 1958. Narró cómo fue la sucesión en su compañía. Explicó que recurrieron a expertos porque "no sólo es un proceso importante para la familia, sino también para los empleados que trabajan con ellos, que necesitan saber cómo se desenvolverá todo". Añadió: "No es lo mismo para un gerente desenvolverse en una organización donde se valorice lo profesional que en otra donde solamente se considere lo familiar. El protocolo es fundamental".

El ejecutivo ingresó en la organización en 1976. En ese momento, había 15 empleados. Actualmente, hay 1100. En las últimas décadas, la compañía dejó de depender exclusivamente de los Rodríguez en lo que respecta a la operación y hace cinco años incorporó un gerente general externo. Sin embargo, la genética aún "tira" en algunos aspectos: "Nosotros sacamos algunos productos que el mercado no aceptó, pero que después de muchos años relanzamos y tuvieron mejor recepción. Eso sucede en las empresas familiares: tienen mucho empuje, muchas ganas de hacer cosas nuevas, y a veces se adelantan", expresó. No obstante, hizo hincapié en la necesidad de innovar tanto en productos como en comercialización para estar al día con los consumidores.

Además de innovar, otra compañía se inclinó por diversificar. Se trata de Grupo Presidente, que con la entrada de Julián Groisman -el hijo del fundador- ingresó en los agronegocios con inversiones en el cultivo de nogales. "Tenemos el proyecto ambicioso de ser el principal productor argentino de nuez", sostuvo el ejecutivo. Contó que la libertad dentro de la empresa familiar fue clave.

Más adelante, se refirió a la tensión entre ser "el hijo de" y la profesionalización de la compañía. "Estamos transitando la profesionalización y buscamos que siempre perdure la mejor idea, venga de donde venga -añadió-. Eso es un reto: soy uno más y tengo que brindar resultados. La responsabilidad del hijo implica que uno tiene beneficios, pero también la exigencia de demostrar más que en otro empleo". Agregó que siente la necesidad de entrar primero e irse último y que, a medida que fue pasando el tiempo, con respeto a los demás empleados y con la demostración de que "la vara de medición es la misma para todos", los prejuicios sobre él se diluyeron.

Siguieron las historias de padres "generosos" y le tocó el turno a Gavuzzo, tercera generación en la compañía de muebles Della Casa. ¿Cuál fue la generosidad del suyo? Dejarle espacio para proponer la venta al público y la fabricación exprés, lejos de la hecha a medida que demoraba los tiempos de entrega. "Yo venía de trabajar en empresas de consumo masivo y había hecho la carrera típica -relató-. Fui a la universidad, hice un posgrado y todo lo que a veces los padres esperamos de nuestros hijos". En algún momento, explicó, tuvo ganas de emprender y fue hacia "lo que tenía a mano": la empresa familiar. "Mi padre estaba casi cerrando la compañía, eran tiempos difíciles. Él quería otra cosa para mí, pero yo le dije que veía un potencial enorme en el mercado, que en ese momento era chico. Nos asociamos, refundamos la marca y nos pusimos al hombro la idea de poner un local y salir de nuevo al ruedo", recordó.

A su juicio, estar rodeado de la familia para hacer negocios es un plus que tiene sus desafíos: "Nosotros discernimos cuándo somos directores y cuándo somos hermanos, hijos y primos. A veces es fácil y a veces no tanto, pero lo importante es cuidar la familia", concluyó. 

Fuente: La Nación